
Vuelen alto mis guerreros…
Rezaban los carteles en la plaza de San Miguel del Monte.
Ni un pibe menos.
Los pibes no son peligrosos, están en peligro.
Y hablaron ellos, los padres, las madres, los hermanos, desgarrados por ese dolor inimaginable. Y hablaron con esa fuerza, con ese coraje, con esa valentía que sale de las entrañas. Como solo pueden hablar aquellos que deciden convertir el dolor en lucha.
Un pueblo movilizado y la solidaridad de muchos se hizo presente, desde diferentes lugares, organizaciones, espacios.
No naturalicemos los asesinatos de nuestros pibes, no aceptemos de ninguna manera la impunidad.
Nos volvimos camino a casa interpelados, por la lucha de los familiares, de un pueblo. Por la búsqueda de justicia, por la necesidad de encarcelar a TODOS LOS RESPONSABLES!! Porque cada vez que nos arrebatan la vida de un pibe, ya nada vuelve a ser como antes.
Mañana el juez de la causa debe decidir si mantiene la prisión preventiva o va a dejar libres a las fieras que provocaron esta masacre.
Hoy en la plaza de Monte todos reclamamos por cárcel a los asesinos.