El Gobierno de Macri
habilitó el uso de pistolas Taser a las fuerzas policiales y de
seguridad federales y presenta la medida como “un intermedio” para el
uso de la fuerza.
Las pistolas Taser, que provocan descargas
eléctricas sobre su víctimas, constituyen una forma de tortura, y en
algunos casos, pueden incluso causar la muerte, así lo denunció el
Comité de las Naciones Unidas contra la Tortura. Como ejemplo, en EEUU
desde el año 2001 hasta el 2012 por lo menos 500 personas murieron
después de recibir una descarga de estas armas.
El viceministro de
Seguridad, Gerardo Milman, aclaró que “no son armas para largas
distancias”, sino para ser utilizadas “donde hay mucha acumulación de
ciudadanos” y la ministra Bullrich, para que no queden dudas acerca de
con quienes quiere usarlas, señaló que podrían usarse por ejemplo en
el “ Hospital Posadas, donde están los gendarmes y donde hay muchas
veces situaciones de violencia….”, refiriéndose a las protestas de los
trabajadores que se oponen al cierre del Hospital y poniendo el
objetivo del uso de las taser, en primer lugar, en la represión
gremial y política.
Parafraseando el dicho “como mono con navaja”, Bullrich se regodea literalmente “como facho con picana”.
El uso de estas pistolas en manos de las mismas fuerzas federales que
desaparecieron a Santiago Maldonado, que asesinaron a Rafael Nahuel y
que asesinan, persiguen y atropellan a tantos jóvenes en los barrios
populares, implica, lisa y llanamente, otorgarles el permiso a
torturar a plena luz del día.
• NO EXISTEN ARMAS NO LETALES EN MANOS DE LAS FUERZAS REPRESIVAS.
• NO AL USO DE LAS TASER.
• FUERA BULLRICH.
ENCUENTRO MEMORIA VERDAD Y JUSTICIA